Algo versátil y poco veraz, así
es como califico este telefilme. Y es de este modo porque a pesar de los datos
que se han podido obtener a raíz de los comentarios y biografías de los
protagonistas, nunca podremos saber cuál fue la verdadera historia de estos dos
genios.
Dos genios porque tanto BillGates (Microsoft) como Steve Jobs (Apple) supieron abrirse hueco dentro de una
industria prácticamente inexistente, tanto es así que se les puede considerar
los padres de la informática.
Steve Jobs, creador del primer
ordenador personal, Macintosh 128K,
supo cómo hacer de su pasión fuente de ingresos, tantos que logró subirse a la
cresta de la ola con tan solo 26 años, siendo millonario. Su ambición, mostrada
en la película, hizo que consiguiera cualquier meta propuesta, y todo tuvo comienzo
en un garaje, junto a su amigo, Steve Wozniak, quien se desmarcó de tal negocio
cediendo parte de sus acciones a otro amigo, con menor implicación, pero integrante
del proyecto.
Paralelamente, Bill Gates, Creador
de la empresa de software Microsoft, supo cómo hacer de su idea un
imperio, un imperio que llegó a la cúspide poco después de lograrlo Jobs. De forma
más o menos legítima, los dos supieron abrirse hueco en el círculo informático, un mundo en el que había
más preguntas que respuestas.
No me pilla por sorpresa la vida
de estas dos personalidades, pues he indagado con anterioridad en sus
biografías, ya que son dos grandes iconos del mundo que hoy en día hemos
conformado.
Y ahora, a modo de reflexión, me
gustaría decir que tanto a uno como al otro le pudo el éxito, pues en sus
inicios, estudiantes, jóvenes, partieron de un sueño como si de un juego se
tratase. Se trataba de dar un paso más, arriesgando todo y nada, nada porque
era un primer proyecto y todo porque se dejaron la piel en él.
El imperante mundo capitalista en
el cual estamos implicados, y en el que se han desarrollado estos dos grandes
empresarios del mundo de la tecnología, nos mueve a realizar actos que pueden
ir en contra de la moral y la ética. Respondiendo a mis compañeros, estoy
totalmente de acuerdo en que tanto uno como otro se ha dejado llevar por la ambición
y el éxito, y no han buscado el reconocimiento, aquello que desde mi punto de
vista era lo que buscaban cuando apenas comenzaron y no eran nadie.
Y es que en una parte de la
película, Bill Gates cita lo siguiente: “Nuestro trabajo
consiste en encontrar lo que ese tipo no sabe que necesita, pero necesita, y
luego asegurarnos de que sepa que lo necesita y de que somos los únicos que
podemos dárselo.”
A través de esta
frase Gates muestra su interés por satisfacer al usuario, por dar más allá de
sus posibilidades.
“No hemos sido los primeros, pero
seremos los mejores, porque la innovación es lo que distingue a un líder
de los demás.” Y este era el punto distintivo de Jobs, no ser el primero, sino
hacer creer a los demás que era el primero, mejorando con creces lo anterior.
Creo que mediante estas dos
frases de los famosos informáticos podemos apreciar donde radicaban de cierto
modo sus diferencias e inquietudes.
Por último, me gustaría añadir que,
copiando o no, ellos dos han dado paso a lo que tenemos hoy en día, ¿qué
haríamos sin los ordenadores personales? ¿Y si los móviles inteligentes? Ellos son
los creadores de esta era.
Desde luego que tienen su mérito. Y contestando a tus retóricas preguntas sobre qué haríamos si no se hubiese dado tal desarrollo tecnológico, sinceramente no lo sé. No niego que ello haya sido positivo en multitud de aspectos,tales como el acceso a la información vía web, o la consecuente globalización que nos permite "comunicarnos" de la manera más rápida y sencilla... Parece que todo ha evolucionado en función de las necesidades de la gente, obteniendo como resultado un mundo cubierto de facilidades y comodidades para las personas. Ahora me pregunto si tal "confort" nos beneficia tanto o si por el contrario, genera una gran desigualdad e incompetencia en el hombre. ¿Móviles inteligentes? ¿Robots que te desean "un buen día" en los supermercados? ¿Gente hipnotizada ante una pantalla?... No sé, sinceramente me da miedo.Resulta algo inquietante pensar en el futuro dadas las condiciones actuales y creo que es preocupante el que dicha digitalización termine por deteriorar demasiado nuestra esencia de <>. Creeréis que es una locura hablar en estos términos cuando somos los primeros partícipes y contribuidores en la construcción de esta "era de la información" en la que vivimos envueltos, pero tal vez seríamos más felices, que no por ello más ignorantes, e incluso algo tan efímero como el tiempo cobraría menos relevancia si no hubiésemos llegado a esta situación. Un punto en el que las máquinas parecen suplir, y con creces, las funciones y cualidades de las personas. Personas de carne y hueso, capaces de crear esos "móviles inteligentes" a los que hacíamos referencia. Amigos, los móviles no son inteligentes... pero nosotros sí. En definitiva, no sé si deberíamos aplaudir a los colegas por esta creación... Lo único que sé, es que todo lo que sube termina por bajar, y en este caso puede que ocurra de manera apocalíptica... Un apagón, una rebelión.. lo que sea, pero algo que nos de una lección y nos recuerde que la vida, tal y como se nos ha concedido, no entiende de ordenadores ni sistemas informáticos, pero sí de valores que poco a poco parecen difuminarse a medida vamos disponiendo de más y más...
ResponderEliminarNo es por crear un conflicto, pero ¡qué narices!, debatamos.
ResponderEliminarMe resulta curioso que, Tamara, califiques a la película de "poco veraz" argumentando que "nunca podremos saber cuál fue la verdadera historia de estos dos genios", y dos líneas más abajo añadas un link de la biografía de ambos "genios" sacada directamente de la incomparable y reputada enciclopedia digital Wikipedia como si eso fuera dogma. En mi opinión, admiro tu cautela y, por qué no, escepticismo a la hora de ver una película controvertida, puesto que no dice de ti sino que no buscas más que la verdad de los hechos, no contentándote con meras frivolidades.
Pero lo interesante no es tanto si lo que se narra ocurrió realmente, o al menos, personalmente, no me parece tan interesante como la propuesta que se hace en la película. Una propuesta que rompe con la imagen que teníamos de Steve Jobs y Bill Gates, retratando personajes que derrumban dos ídolos.